Emilio Quintana Pareja
Estocolmo, Suecia
Reseña | Andreu Navarra Ordoño (ed.): L´impacte de la Primera Guerra Mundial a Catalunya. Afers, 89, 2018
Por fin se ha publicado el esperado dosier de la revista Afers (89, 2018) dedicado a L´impacte de la Primera Guerra Mundial a Catalunya, que ha coordinado nuestro querido Andreu Navarra Ordoño, miembro del Comité de Redacción de Hallali.
El dosier consta de 5 artículos que ocupan las páginas 19 a 132, casi la mitad del contenido de la revista, si bien en la sección bibliográfica («recensions») encontramos 7 páginas más (237-243) dedicadas a un par de libros recientes sobre el mismo tema. Un total de 120 páginas. 1
Con esta iniciativa no se pretende ofrecer un panorama completo sobre la Gran Guerra en Cataluña, algo que en buena parte ya se ha acometido con algunos libros (a cargo del propio Andreu Navarra (UOC) o del admirado polígrafo Maximiliano Fuentes Codera, uno de los historiadores más activos y recomendables sobre la Gran Guerra), sino en profundizar sobre algunos aspectos concretos que reubiquen el mapa de la investigación en curso.
Tras una breve introducción del coordinador, Josep Fontana (Universitat Pompeu Fabra) hace un resumen impecable de «La Primera Guerra Mundial», con el que estamos básicamente de acuerdo, y en el que, además, podemos encontrar algunos detalles que aportan valor añadido a su contribución, ya que nos hacen reflexionar desde una perspectiva poco usual; por ejemplo, los motivos del genocidio de los armenios por parte de los turcos, o la continuación de la guerra hasta 1923 (poco se suele hablar del destino de los griegos de Anatolia).
Josep Lluís Martín i Berbois (Memorial Democràtic) publica un exhaustivo estudio sobre la neutralidad catalana centrado en «La posició política dels membres de la Lliga Regionalista davant la Gran Guerra». Martín i Berbois analiza las diferentes posiciones que los miembros de la Lliga van tomando a medida que avanza el conflicto, y analiza acertadamente las posiciones de Francesc Cambó -a destacar, su artículo de primera hora sobre la resistencia de Bélgica ante Alemania, que le será reprochado al final de las hostilidades-, y de Eugeni d´Ors -su dimensión europeísta, cercana a la Sociedad de las Naciones que impulsa el grupo de Romain Rolland. El autor hace también un profundo análisis de los equilibrios de la neutralidad, desde el punto de vista político (la gran actividad que despliega la Mancomunitat de Catalunya frente al perfil «inepte» e «inactiu» del Gobierno de España), y económico (los beneficios de vender a los países en guerra). El autor demuestra que la modorra de Madrid tuvo en Cataluña el efecto de posicionarse como motor de la nación, pero también como vanguardia de una futura federación ibérica (iberismo), tema que podemos considerar de plena actualidad hoy en día 2. Finalmente, se toma nota de cómo el gran triunfo de la Lliga en las elecciones de 1916 no cuaja en resultados políticos concretos, a pesar de la entrada de Cambó en el Gobierno central, sino que acaba con la salida de Prat de la Riba de la Mancomunitat
Xavier Pla (Universitat de Girona) se encarga de profundizar en la germanofilia catalana tomando como objeto de estudio «L´Alemanya negra, de Manuel de Montoliu. Itineraris creuats, línies de continuitat i ruptures entre germanofília, hispanofília i catalonofília». En la línea de lo que en su día apuntó Francisco Ayala, y que cada vez tiene mayor sustento probatorio, se vincula la figura de Manuel de Montoliu (Barcelona, 1877-Tarragona, 1961), y de la germanofilia catalana en general, a un proceso que terminaria con la adhesión al franquismo durante la Guerra Civil:
Quan s´abordi definitivament el seu estudi i, sobretot, quan es reflexioni sobre les figures que la van encapçalar (Pere Barnils, Antoni Griera, Esteve Terrades, Ramon Rucabado, Faustí Vallvé, Pere Bosch Gimpera, Jordi Rubió i Balaguer…) serà problablement ivevitable relacionar-la amd les posicions posteriors dels intel-lectuals catalans durant la Guerra Civil espanyola i el primer franquisme.
Este estudio de Pla era absolutamente necesario, ya que Manuel de Montoliu es una figura que elabora posiblemente el mayor corpus ensayístivo e intelectual de la germanofilia española, asociado a una manera de entender una España federal al estilo de Alemania, es decir, opuesta al jacobinismo francés. Montoliu considera a Cataluña como la Prusia española, y así se encarga incansablemente de dejar constancia en los numerosos artículos (en castellano) que publica fundamentalmente en el periódico El Día Gráfico y en Germania. Revista de confraternidad hispano-alemana (Barcelona, 1 marzo 1915-15 noviembre 1918). La España federal y germanófila de Montoliu se sustenta en un expansionismo antifrancés (recuperación del Rosellón y de Marruecos), y antisajón (recuperación de Gibraltar), lo que representa una versión castiza del irredentismo italiano, que encarnan figuras como Gabriele d´Annunzio (inevitable no recordar la campaña de Fiume, que hemos reseñado en esta revista), o Marinetti: «¿Comprenden ahora nuestros aliafófilos que nuestra germanofilia no es sino pura hispanofilia?», dice 3. La riqueza de ideas de este ensayo de Xavier Pla dará fruto, sin duda, en posteriores estudios, puesto que está lleno de sugerencias a explorar.
Francesc Montero (Universitat de Girona) se encarga de situar en su justa medida la intervención de los voluntarios catalanes en la guerra, un tema sobre el que arroja nueva luz mediante el estudio de campo sobre fuentes primarias. Esta vuelta a los archivos puede resultar menos amena, pero es absolutamente necesaria. Su estudio destruye varios mitos: no hubo 12.000 voluntarios catalanes, sino poco más de 1.000, y la mayoría eran ciudadanos franceses de origen catalán (caso de Fredreric Pujulà, nacido en Palamós en 1877, pero ciudadano francés). Más que voluntarios hubo soldados movilizados, caso de Pujulà, convertido en icono periodístico catalanista gracias a las crónicas que manda desde el frente a El Poble Català. La importancia de Pujulá radica en la excelente calidad literaria de sus crónicas, y en el realismo con el que refleja la guerra, es decir, en su falta de épica y heroísmo, en un manera que tendrá su continuación a finales de los años 20 con las novelas de la guerra:
El volum de Pujulà va a ser reeditat al voltant d´una dècada més tard, concretament el 1929, coincidint amb la renovació de l´interés editorial pel testimoni directe de les experiències de la guerra i la publicació a tot Europa de nombroses narracions que tenien com a eix central la memòria del conflicte.
Montero trata también sobre los intentos de crear una Legión Catalana, así como otras iniciativas de Hermandad con Francia, que tendrán un dudoso éxito. El intento de convertir al voluntario catalanista Ferrés-Costa en icono del voluntario nacionalista catalán chocará, además, con la escasa calidad literaria de sus cronicas, truncadas definitivamente por su temprana muerte (mayo de 1915). Montero se ocupa de algunas otras figuras menores en esta línea (no se olvida de los carlistas), pero concluye considerando que Fredreric Pujulà es la única figura que puede ser equiparada a la del cronista-soldado, tal y como se entiende en la amplísima bibliografía de que disponemos ya en países como Francia o Inglaterra. De ahí la importancia de sus dos libros de crónicas: De la trinxera estant (Barcelona, 1918), y En el repòs de la trinxera. Cartes del soldat a l´amic (Barcelona, 1918). El último ha sido reeditado filológicamente en 2006.
El último ensayo de este dosier imprescindible, coordinado por Andreu Navarra, se titula «L´efímer frenesí de l´armistici des de les pàgines del diari aliadòfil La Publicidad (1918)», a cargo del conocido investigador Joan Safont (Universtat de Girona), autor del clásico Per França i Anglaterra! La Primera Guerra Mundial dels aliadòfils catalans (Acontravent, 2012). Safont utiliza un tono algo zumbón muy agradable (que se encuentra también en Sagarra y en Pla), sin dejar de aportar el máximo detalle acerca de la manera en que el dinero de los hermanos Tayà sirve para comprar una cabecera en horas bajas y convertirla en el órgano más serio de la aliadofilia y, como consecuencia, del catalanismo que verá en las tesis de Wilson el camino hacia la soberanía nacional. Todo ello de la mano del ex diputado e inspirado francófilo Amadeu Hurtado. Es un placer leer la prosa de Safont, que nos lleva de banquete en banquete, de discurso en discurso, de legación en legación, de homenaje en homenaje (telegramas que no falten), en lo que fue también un movimiento popular que ocupó las calles, ante el disgusto esperpéntico del Gobierno Civil. Que nada de esto sucediera en Madrid es una evidencia de cómo la guerra se había vivido de forma diferente en cada ciudad.
Este ensayo me ha sido, por lo demás, de gran ayuda personal, a la hora de enmarcar la numerosa contribución del escritor polaco Tadeusz Peiper en La Publicidad. No falta (afortunadamente) la dimensión poética, a la hora de glosar la relación entre Josep Maria Junoy y Guillaume Apollinaire, que difunde en Cataluña la figura mediadora de Joan Pérez-Jorba. Sobre este tema, les remito a mi ensayo sobre traducciones catalanas en revistas belgas de vanguardia. 4
Estamos ante una gran recopilación de trabajos que nos permiten profundizar en un campo que lleva tiempo abierto, en exploración. No cabe duda de que, a partir de este dosier, podrán darse nuevos pasos más firmes a la hora de seguir comprendiendo la importancia de la Primera Guerra Mundial en la cultura catalana y española. Felicidades a Andreu Navarra Ordoño, como coordinador científico del dosier, por su intelegencia a la hora de detectar huecos que había que completar y acoger a los autores que podían hacerlo, así como a la revista Afers por haber publicado estos trabajos en tiempo y hora.
NOTAS
- David Martínez Fiol habla sobre la reedición en un volumen (Barcelona, 2016) de la magna obra de Antoni Rovita Virgili, La Guerra de les Nacions -publicada originalmente en 5 volúmenes en 1925-, mientras que Lucila Mallart reseña La gran guerra a les comarques gironines (Girona, 2015), de Maximiliano Fuentes Codera. ↩
- Recordemos que Francisco Ayala en el prólogo a La cabeza del cordero (1949) sitúa en la Primera Guerra Mundial, en la división entre aliadófilos y germanófilos, el origen de la España moderna ↩
- Manuel de Montoliu: «Programa de conquista», El Día Gráfico (10-X-1916), p. 3. ↩
- Emilio Quintana Pareja: «El Ultraísmo español en las revistas de la primera vanguardia belga: poesía y grabado en madera (Amberes-Bruselas, 1920-1922). 1611. Revista de Historia de la Traducción, nr. 6 (2012) (Universitat Autònoma de Barcelona) ↩